Libro Cada día Un Nuevo Comienzo 10 de Diciembre Meditaciones diarias para Mujeres/Hombres

 

10 de diciembre. La meditación para las Mujeres que aman demasiado.

La recuperación de amar demasiado atraviesa varias frases. La primera comienza cuando advertimos lo que estamos haciendo y deseamos cortar con eso. A continuación llega nuestro deseo de conseguir ayuda para nosotras mismas, que es seguido por nuestro intento inicial por asegurarnos esa ayuda. Después, entramos en la fase de la recuperación que requiere nuestro compromiso con nuestra curación y con el deseo de continuar con nuestro programa de recuperación. Durante este período comenzamos a cambiar nuestra forma de actuar, de pensar y de sentir. Lo que en otro tiempo nos resultó familiar y normal comienza a parecernos incómodo y enfermizo. Cuando comenzamos a hacer cosas que ya no siguen nuestros viejos esquemas sino que valorizan nuestras vidas y promueven nuestro bienestar, entramos en la etapa siguiente. A través de los diferentes estadios de la recuperación, el amor por una misma crece de forma lenta pero sostenida. Primero dejamos de odiarnos y luego nos volvemos más tolerantes con nosotras mismas. A continuación, aparece una incipiente apreciación de nuestras cualidades, y sobreviene entonces la autoaceptación. Finalmente, llega el genuino amor por una misma.
Robin Norwood.
El ánimo del perdón es un poder magnético que atrae la bondad. Ninguna cosa buena escapa de él.

Catherine Ponder

El perdón favorece la humildad, invitando a la gratitud. Y la gratitud nos bendice y engendra una mayor felicidad. Cuanto más agradecidas estemos por todos los aspectos de nuestra vida. Mayores serán nuestras recompensas. Mientras no practiquemos la gratitud, seremos incapaces de reconocer la bondad de nuestra vida. Y la gratitud llega más fácilmente si somos indulgentes.

El perdón debe ser un proceso constante. Al dedicarle cada día nuestra atención facilitamos nuestras relaciones con los demás y propiciamos una mayor autoestima. Las primeras en la lista de personas a quienes hemos de perdonar debemos ser nosotras mismas. Diariamente nos recriminamos y nuestra falta de autoestima interfiere con nuestra capacidad de amar a los demás, la cual, a su vez, afecta a la forma en que los tratamos. De esta manera volvemos al punto de partida, por lo que debemos perdonarlos. El perdón nos libera, cambia nuestra percepción de los sucesos de la vida y nos promete una mayor felicidad.

El corazón que perdona es mágico.

Toda mi vida se transformará si hago que mi corazón sea indulgente.
Karen Casey.