CoDA Alimento para el Alma

Todo llega a su fin. La noche más agotadora y el día más angustioso, tarde o temprano deben terminar. Baronesa Orczy Las rachas difíciles de nuestra vida tienen un final, e independientemente de lo profunda que sea nuestra angustia, sobreviviremos. Con frecuencia nos olvidamos de que los abismos nos enseñan a apreciar mejor las alturas. La pena realza a la alegría. La depresión acentúa la risa. De no ser por las penas, no conoceríamos ni la alegría ni la risa. Aquellas nos enseñan a ser pacientes, a esperar la sabiduría que iluminará nuestro camino. Nos enseñan a escuchar la señal que nos anima a avanzar. Debemos reflexionar sobre las experiencias desagradables por las que hemos pasado, pues ella nos ha hecho más sabias y más fuertes. Los malos momentos nos han transformado, acercándonos a la mujer plena y feliz que deseamos ser. Las dificultades suelen anunciar momentos luminosos. Nos empujan hacia dentro y nos impulsan a buscar en nuestro corazón la unión con Dios. Por extraño q

  Estar sola y sentirme vulnerable. Estas dos partes mías se unen en mí ser para sembrar las semillas de mi anhelo por el amor incondicional. Mary Casey. Qué fácil nos resulta dudar de nosotras mismas, temer que seamos incapaces o indignas de ser amadas. Qué común es para nosotras buscar amor y afirmación en los rostros de nuestros amigos o de nuestra pareja. El alejamiento de nosotras mismas, de los demás y del Espíritu omnipresente de Dios nos provoca descontento. Cuando las almas se tocan nace el amor a nosotras mismas y a los demás. Nuestra soledad surge cuando creamos barreras que nos separan de nuestros amigos, de nuestra familia. Sólo nosotras podemos saltar o rodear esas barreras para dar y ofrecer amor. La recuperación nos ofrece las herramientas para amar, pero debemos atrevernos a tomarlas. Escuchar a los demás y compartimos a nosotras mismas es el primer paso del proceso de amar. Al arriesgarnos a ofrecer amor antes de recibirlo nos liberamos de la continua búsqueda de

  La felicidad es el resultado de nuestros esfuerzos por hacer felices a los demás. Gretta Broker Palmer Nos hemos esforzado por alcanzar la felicidad, aunque generalmente en forma egoísta. Por ejemplo, hemos esperado que los demás nos favorezcan con su atención. O que nos hagan regalos o invitaciones. Probablemente hayamos tratado de comprar felicidad adquiriendo un nuevo vestido o un par de zapatos. Pero sólo obtuvimos breves momentos de felicidad efímera, nada más. Pronto estábamos tristes otra vez. Y empezábamos a buscar de nuevo. Pero para algunas de nosotras las cosas han cambiado, aunque quizás lentamente estamos aprendiendo a encontrar una felicidad más duradera. Ahora sabemos que la felicidad que se obtiene al poseer algo es pasajera y que la manera de hallar esa felicidad que hemos estado buscando durante tanto tiempo es dar a los demás, ofrecerles nuestra atención, compartir con ellos nuestras esperanzas y nuestras experiencias y también escuchar las suyas. Debemos sali

  No creáis nada por el simple hecho de que muchos lo crean o finjan que lo creen; creedlo después de someterlo al dictamen de la razón y a la voz de la conciencia. Frase de Buda Lo que suceda en la vida forma parte de tu destino. Basta con que así lo reconozcas para hacerlo tuyo. Florida Scout Maxwell La búsqueda ha comenzado. En algún momento todas nos hemos preguntado: ¿Quién soy? Somos afortunadas por tener el programa, pues nos muestra el camino del autodescubrimiento y nos lleva a reconocer nuestro yo, lo cual es uno de los dones de la recuperación. Es posible que los sucesos de nuestro pasado nos atormenten, pero ellos contribuyeron a la plenitud que sentimos hoy. Agradezcamos lo sucedido y reconozcamos su intervención en nuestro cambio. Aceptamos como somos, con lo bueno y lo malo, nos reconforta y nos hace asumir la responsabilidad por lo que fuimos y por lo que somos ahora. Al aceptarnos a nosotras mismas nos convertimos en partícipes activas de nuestra vida. Las opcione

  "La belleza en el mundo tiene dos lados, uno la risa, uno de angustia , cortando el corazón en pedazos " . Virginia Woolf La angustia es, sin duda, más familiar para nosotros de lo que es la belleza de la risa. Sentimos angustia por nuestros fracasos, sentimos angustia por nuestras pérdidas , sentimos angustia por los intentos de tener éxito que nos llama . La angustia viene del miedo. Y por lo que esperamos poder evitarlo. Sin embargo, es el momento para nosotras como mujeres, para enriquecernos aun cuando momentáneamente nos estemos disminuyendo. Es una importante contribución a la suma y la sustancia de nuestra vida. La angustia que experimentamos nos prepara para ayudar a los demás se enfrentan a su propia angustia particular. Nuestra risa, también, debe ser saboreada y compartida. Y la risa se ​​construye más risas. La risa le da una perspectiva a nuestra angustia. La vida se hace más rica, más completa, por el flujo y reflujo , la risa y la angustia en conjunto.

  Quiero bailar siempre y ser una buena persona, y cuando todo termine, no tener la sensación de que pude haberlo hecho mejor. Ruth St. Denis Nuestras aspiraciones en la vida pueden ser simples o complejas. Quizás no estén muy claras en nuestra mente, pero se aclararán si somos pacientes. Dios sabe cómo darnos un “aviso interno” cuando cierta dirección nos atrae. Nuestra responsabilidad es seguir el impulso y confiar totalmente en él. Con demasiada frecuencia miramos hacia el pasado con remordimientos. Lo hecho, hecho está. Esos errores nos enseñaron ciertas lecciones. Cada día es un nuevo comienzo, y si seguimos nuestra conciencia, si seguimos ese “aviso interno” que nos indica el camino, podremos concluir cada jornada sin arrepentimiento. El día de hoy nos dará oportunidades. Oportunidades de ser buenas o malas personas. Oportunidades de tomar decisiones que nos hagan sentir bien o con remordimientos al final del día. Muchas de nuestras decisiones nos darán satisfacción y alegría

  Las tolerancia es el mejor don de la mente. Helen Séller Para afrontar las situaciones que nos gustaría cambiar y aceptar a las personas que desearíamos que fuesen diferentes, necesitamos crecer, ser pacientes y tolerantes. Con facilidad nos convencemos de que seríamos más felices “si él cambiara”, “si tuviera un mejor empleo” o “si los hijos sentarán la cabeza”. Sin embargo, la semilla de la felicidad está siempre en nuestro interior. Si aprendemos a ser tolerantes ante cualquier situación, alimentaremos esa semilla. La intolerancia, la impaciencia, la depresión y, de hecho, toda actitud negativa, terminan por volverse costumbre. Muchas de las que participamos en este programa de recuperación aún luchamos contra los hábitos que hemos adquirido. Debemos sustituir nuestros hábitos negativos por hábitos nuevos y positivos. Podemos asumir una nueva conducta que nos complazca, como sonreír a quienes estén en la cola del supermercado. Si la repetimos, se volverá un buen hábito. La to

  No podemos volver atrás. Eso es totalmente cierto. Daphne DuMaurier El pasado se ha ido, pero sus experiencias se reflejan en las que estamos viviendo hoy. Hemos aprendido de las situaciones de ayer, de las positivas y de las negativas. Del mismo modo, nuestro viaje de hoy influirá en la dirección, pero sí podemos incorporar a este momento todo lo positivo que el pasado dejó en nosotros. Cada experiencia nos hace avanzar hacia una mayor comprensión de los misterios de la vida. Al transcurrir el día de hoy, tal vez ciertas aventuras nos conmuevan. Nuestras experiencias nos pertenecen sólo a nosotras y contribuyen a desarrollar nuestro destino especial. Vamos hacia delante, sólo hacia delante. Las puertas que hemos dejado atrás se han cerrado ya para siempre. Entre los dones del programa que compartimos están el de afrontar con valentía lo que nos ocurre y también el de desligarnos del pasado. Pero el mayor regalo es la confianza de saber que lo estamos viviendo, junto con aquello

  Debes hacer aquello que crees no poder realizar. Heléanos Roosevelt ¿Cómo podemos hacer algo que parece imposible? Tomar una clase, renunciar a un empleo, dejar una relación destructiva, pedir ayuda; no podemos hacer nada de esto solas ni con facilidad, pero lo podremos lograr si confiamos en la ayuda que el programa nos ofrece, la ayuda mutua, la ayuda prometida por nuestro poder superior. Enfrentando lo que parece imposible con la ayuda de Dios, ello se reduce a un tamaño manejable y el poder que nuestros miedos le han conferido disminuye. Lo que tememos crece según nos obsesionemos con ello. Cuanto más temamos a algo, más grande se vuelve, lo cual a su vez, incrementa nuestro miedo. ¡Qué afortunadas somos, pues Dios espera que le pidamos la fuerza y la compañía que nos ha prometido! El está con nosotros, siempre, tan sólo tenemos que ser conscientes de ello. Podemos seguir adelante y podemos superarlo todo. Pronto nos damos cuenta de que todas las situaciones pueden ser resuelt

  Cuando tomamos decisiones importantes en nuestra vida no suena ninguna trompeta. El destino se da a conocer en silencio. Agnes DeMille En el día que comienza tendremos que tomar decisiones de todo tipo: algunas serán importantes, otras afectarán a las personas que nos rodean y otras tendrán repercusiones en nuestro futuro. Pero ninguna elección que hagamos ni ninguna decisión que tomemos serán incorrectas. Es posible que una decisión particular nos lleve por un camino ligeramente inadecuado, o quizás incluso a un callejón sin salida, pero siempre podemos volver y elegir de nuevo. Pocas veces somos conscientes de la importancia de una elección en el momento en que la realizamos. Sólo transcurrido el tiempo nos damos cuenta de su relevancia. Sin embargo, en  el conjunto de nuestra vida todas las elecciones son importantes, aunque ninguna de estas condicione por completo nuestro futuro. Una y otra vez se nos ofrecen oportunidades de tomar las decisiones correctas, las que más contrib

  La gente no tiene idea de hasta qué punto es arrastrada por el miedo. Este miedo no es fácilmente definible. Hay momentos en que este miedo se vuelve casi una obsesión. George Gurdjieff Para mantener intacto tu personaje, no puedes rebajarse a cometer actos sucios, pues esto haría más fácil que te degrades la próxima vez. Catherine Hepburn Comportarnos de la manera en que Dios desea que lo hagamos parece muy fácil. Nosotras no lastimamos intencionalmente a los demás. ¿O sí? ¿Cuándo fue la última vez que nos consumió la envidia por la buena fortuna o la buena imagen de otra persona? ¿Ha habido alguna ocasión reciente en la que nos hayamos malhumorados por falta de atención…o en la que quizás hayamos buscado un pretexto para iniciar una pelea? A partir de este momento podemos simplificar nuestra vida. Para aligerar nuestra carga y liberarnos de nuestras angustias no tenemos más que un camino a seguir, sólo una decisión que tomar. Podemos elegir actuar de buena fe. Guardemos silen

  No es posible pagar sólo con gratitud. Debemos pagar “con la misma moneda” en algún otro momento de nuestra vida. Anne Morrow Lindbergh La vida es una serie de retribuciones. La expresión según la cual “recibimos lo que damos” es una verdad que gobierna la vida de cada una de nosotras. Como mujeres y como miembros de familia humana, hemos recibido “pagos” de otras personas. En ocasiones, quizás el pago no haya sido exactamente lo que nosotras hubiésemos elegido. Pero con el tiempo nos damos cuenta que lo recibido fue para nuestro bien. Lo que ahora debemos hacer es compartir con los demás los beneficios recibidos. Si damos a los demás la alegría que hemos experimentado, si les ofrecemos la comprensión que se nos ha dado, si les brindamos la amistad que se nos ha otorgado, pronto recibiremos otro tanto de cambio Tú y yo nos encontramos el día de hoy para cumplir ciertos pagos. Recibiré el tuyo agradable. Karen Casey

  En nuestros sueños y en nuestras aspiraciones encontramos nuestras oportunidades. Sue Atchley Ebaugh Nuestros sueños nos impulsan hacia cumbres más elevadas. Quizás lo único que necesitemos sea el valor para avanzar hacia ellas y dar los pasos necesarios para hacer realidad nuestras ilusiones. Todo lo que debemos hacer hoy es confiar en que los pasos se nos mostrarán uno a uno y esperar pacientemente a dar el correcto en el momento adecuado. Nuestros sueños, cuando son para nuestro bien y el de los demás, son invitaciones de Dios para que abramos nuestras alas y tratemos de alcanzar nuevas alturas. Esos sueños forman parte del destino que ha sido diseñado para nosotras. Nada es casual. Las facultades que poseemos son únicas. Lo que podamos hacer nos corresponde hacerlos únicamente a nosotras. Nuestros sueños reflejan las aportaciones que estamos llamadas hacer en esta vida. Las oportunidades de realizarnos son muy variadas y no siempre las reconocemos como un bien. Una y otra vez

  Las circunstancias fortuitas son los moldes que dan forma a la mayoría de las vidas humanas. Augusta Evans. Generalmente explicamos nuestra buena fortuna o la de algún amigo como el hecho de estar en el lugar adecuado en el momento preciso. Pero es bueno que nos demos cuenta del esfuerzo necesario para estar en el lugar correcto precisamente en el momento justo. Probablemente hemos oído muchas veces en las reuniones que el horario de Dios no coincide necesariamente con el nuestro, y que los hechos sucederán como Dios ha programado para encajar en un esquema mayor que el limitado por nuestro ego. Y, con frecuencia, nuestra paciencia se agota porque no conocemos los designios de Dios. Pero podemos estar seguras de que las puertas se nos abrirán a tiempo. Las oportunidades se presentan cuando estamos listas para ellas. No hay un solo momento que no nos invite a dar y recibir un mensaje especial, una lección particular. Siempre estamos bajo el cuidado de Dios, y cualquier circunstanci

  La amistad duradera debe basarse en los intereses comunes y en las creencias compartidas. Barbara W. Tuchman Todas las personas que compartimos este programa hemos recibido el don de la amistad. Tenemos un interés común: deseamos permanecer sobrias. Y compartimos la creencia de que un poder superior a nosotras puede hacernos recuperar el sano juicio y la salud. Confiamos en nuestro compromiso mutuo. Estamos aprendiendo a vivir los principios del programa en todas nuestras situaciones. Anteriormente, las amistades con frecuencia estuvieron ausentes de nuestra vida. Ciertamente teníamos una amiga aquí y otra allí., pero ¿realmente podíamos confiarles nuestros secretos? Temíamos hacerlo, y nuestro miedo estaba justificado. Es probable que nosotras tampoco hayamos sido buenas amigas. La amistad siempre implica arriesgarnos a ser vulnerables. Significa tomar las decisiones de ser dignas de confianza y nunca retraemos ante ese riesgo y esa decisión. Las amistades enriquecen nuestra vid

  En mi vida me he visto obligada a sacrificar muchas cosas importantes en beneficio de la carrera política de mi marido. Pat Nixon A la mayoría de nosotras se nos enseñó a poner las necesidades de los demás por encima de las nuestras. Pocas veces se nos alentó a embarcarnos en un camino personal, y todos los años que pasamos ocupando el asiento de atrás nos enseñaron que nuestras esperanzas importaban poco. Ahora, para algunas de nosotras el futuro se nos presenta como una hoja en blanco. Ha llegado el momento de trazar un plan para nosotras mismas, pero ¿cómo decidir hacia dónde deseamos ir? ¿Y cómo llegar hasta allí? El programa dice Vive un día a la vez. Nuestros amigos nos recomiendan Concéntrate en el paso que vas a dar. Hemos decidido hacer algo con las circunstancias en las que nos encontramos. Si no fuera así, no estaríamos leyendo estas palabras. Podemos detenernos un momento y reflexionar sobre los cambios que hemos experimentando ya. Estamos en camino. Hemos dado un bue

  No hay verdades nuevas, sino sólo verdades que no han sido reconocidas por quienes las han percibido sin darse cuenta. Mary McCarthy Hoy comprenderemos ideas que ayer no entendíamos. En este año somos conscientes de ciertos detalles de nuestro pasado que en su momento se nos escaparon. Somos cada vez menos ciegas y estamos mejor preparadas para reconocer verdades que antes no pudimos asimilar. Cuando el discípulo está listo, el maestro aparece. Y el maestro trae verdades que debemos integrar en nuestro banco de conocimientos. Las verdades que se nos planteen hoy o en cualquier otro día no siempre nos harían del todo felices. Quizás nos demos cuenta que un trabajo ha dejado de ser adecuado para nosotras. O que una relación ha llegado a su fin. Todo cambio produce inquietud. Pero en el gran esquema de nuestra vida, los cambios provocados por esas verdades son positivos y, con el tiempo, contribuirán a nuestra felicidad... Aceptemos las verdades a medida que se presenten y confiemos

  No permitas que tu propio dolor te impida darte cuenta de que aquellos que te rodean también tienen problemas. Lady Bird Jonson La preocupación exclusiva por nosotras mismas puede arruinarnos la existencia, pues nos impide percibir la verdadera dimensión de nuestros problemas. Al mismo tiempo nos incapacita para recibir de los demás la orientación que nuestro poder supremo pudiese otorgarnos a través de ellos y nos bloquea la percepción de la verdad. Lo curioso es que basta con que pongamos un poco de atención a las penas o las alegrías de otra persona para que nuestro propio dolor se atenúe. Cuando abrimos nuestras mentes a los demás, las ideas surgen. Los mensajes que ellos tratan de transmitirnos son muy importantes para nosotros, y nada de lo que sea dicho con espíritu amoroso carece de significado para nuestra vida. Debemos pensar en todo diálogo como una conversación con el Creador. Lo que necesitamos saber para nuestro propio crecimiento nos será revelado en nuestras conve

  Dios no conoce distancia Charleszetta Waddles La fuerza que necesitamos para salir adelante en un momento problemático esta tan cerca de nosotros como el aire que respiramos. Pero con frecuencia, la memoria nos falla. Tratamos de resolver los problemas por nuestros propios medios, de determinar el curso de acción adecuado. Y tropezamos. Es el momento de recurrir a ese poder de que disponemos. Y nuestra necesidad, cualquiera que sea, será satisfecha. Para muchas de nosotras confiar en Dios, como quiera que concibamos Su presencia, es algo desconocido. Desde niñas se nos alentó para que fuésemos autosuficientes. Aún cuando necesitáramos desesperadamente la ayuda de otra persona, temíamos pedirla. Cuando nuestra confianza se desvanecía, como con frecuencia ocurría, escondíamos el miedo, a veces con alcohol, a veces con pastillas. En ocasiones simplemente nos ocultábamos en casa. Nuestros miedos nunca fueron totalmente abatidos. Asimilar el descubrimiento que hemos hecho lleva tiempo

  Hemos visto demasiado derrotismo, demasiado pesimismo, demasiados enfoques negativos. La respuesta es sencilla: si deseas algo con todo el corazón, puedes lograrlo. Es posible que debas ser paciente, trabajar mucho, luchar e invertir mucho tiempo, pero puedes hacerlo…la fe es el requisito previo de toda empresa… Margo Jones ¿Cuántos sueños hemos dejado morir? ¿Cuántos proyectos hemos iniciado sólo para dejarlos inconclusos? ¿Cuántas veces nos hemos prometido que esta vez será diferente, pero no hacemos nada para que lo sea? La negatividad genera más negatividad. Por fortuna, lo contrario también es cierto. Nuestra actitud nos hará llegar muy lejos. Y una actitud positiva hace posible cualquier cosa. Fuimos creadas para vivir bien. Pero debemos buscar esa clase de vida y estar abiertas ante su invitación, estar dispuestas a hacer el esfuerzo necesario. Nuestros sueños son nuestras invitaciones a avanzar, a tratar de alcanzar una meta mayor. Y la fe en nuestra capacidad de hacerlos

  Reaccionar no es lo mismo que actuar, es decir, no es algo realmente creativo. Elizabeth Janeway Debemos aprender a actuar en lugar de reaccionar. Por desgracia, tenemos mucha práctica en esto último. Y todas somos muy buenas imitadoras. Somos una sociedad acostumbrada a reaccionar, pues permitimos que la buena o mala conducta de otra persona determine nuestro propio comportamiento. Pero tenemos oportunidades ilimitadas de elegir responsablemente nuestra conducta, independientemente de todas las demás personas que forman parte de nuestra vida. Podemos cambiar si lo queremos. Un mal gesto de nuestra pareja no tiene por qué hacernos sentir rechazadas. Las críticas en el trabajo no tienen por qué arruinar nuestro día. Podemos dar las gracias educadamente a un conductor de autobús aún si éste es desconsiderado. Y cuando decidimos por nosotras mismas cómo deseamos actuar y lo hacemos, nuestra autoestima crece. Si alguien nos ofende, quizás dudemos de nosotras mismas durante un momento

  Sin importar cuál parezca el escenario de nuestra vida, podemos hacerle frente y podemos salir adelante. Muriel Rukeyser Tal vez en algunos momentos de nuestra vida sintamos miedo, o incluso terror. Encontraremos situaciones que, al menos durante un tiempo, parecerán ser más de lo que podemos soportar. Pero las nubes se disiparán. Nunca se nos da más de los que podemos manejar, y cada día que pasa nos encontraremos más a gusto con nosotros mismas y con lo que la vida nos da. Terminaremos por aprender que todo pasa y nuestra confianza aumentará a medida que nuestro programa espiritual se fortalezca. Los lazos que nos unen entre nosotras y que nos ligan al programa nos dan plenitud. Si reflexionamos acerca de quiénes somos y sobre lo lejos que hemos llegado, veremos que ahora podemos resolver con facilidad problemas que antes nos abrumaban. La alegría que compartimos es que todo problema ha dejado de ser demasiado grande para enfrentarlo. Y que no tenemos por qué encarar solas ningu

  Creo que el hecho de aceptar que las gratificaciones vengan después de nuestros actos, es un signo de madurez. Peggy Cahn. Es correcto desear sentirnos siempre bien. La felicidad es algo que todas merecemos. Sin embargo, antes de alcanzar un estado de felicidad permanente, debemos emprender ciertos pasos preparatorios, algunos de los cuales no nos producirán alegría. El dolor nos ha impulsado muchas veces a buscar una satisfacción a corto plazo. Sin embargo, pronto nos dimos cuenta que, al igual que en ocasiones anteriores, esa satisfacción dura muy poco. La felicidad duradera no es el resultado de sumar las pequeñas satisfacciones inmediatas. No tenemos que ganarnos la felicidad, sino descubrir dónde se encuentra. Que afortunadas somos por tener el programa como guía en nuestra búsqueda encontraremos la felicidad cuando aprendamos a callar y cuando escuchemos a nuestro yo interno, cuando nos concentremos menos en nuestros problemas personales y más en las necesidades de los demá

  No cedas. Eres lo único que tienes Janis Joplin Cuando no sabemos quiénes somos, es fácil transigir. Cuando no sabemos cuál es nuestra opinión acerca de un asunto, es fácil dejarnos sacudir por una voz enérgica. Los valores pueden confundirnos, o quizás ni siquiera seamos conscientes de ellos. En esas circunstancias, nos volvemos vulnerables ante la persuasión de otra persona. En este programa de Doce Pasos se nos ofrece la manera de conocernos a nosotras mismas. Nuestros esfuerzos reciben apoyo y nos damos cuenta de que tenemos amigas que no desean que hagamos concesiones y que valoran nuestra lucha por conocernos y ser fieles a nosotras mismas. Uno de los mayores dones de la recuperación es descubrir que podemos tomar decisiones que nos representan a nosotras y a nuestro yo interno, y que esas decisiones nos complacen. Todas conocemos la sensación que sentimos en el estómago cuando nos adaptamos, cuanto cedemos en un asunto personalmente importante. Pagamos las consecuencias. Pe

La verdad en si misma solo puede ser alcanzada dentro de uno mediante la más profunda meditación y conciencia. Siddharta Gautama Sakyamuni Cada día de abstinencia aprendemos a ver más claramente lo que nos depara el futuro. Nuestras necesidades egoístas, que distorsionan todo lo que enfrentamos, nos estorban cada vez menos. Todas tenemos en nuestro interior el talento necesario para ver las cosas como son en realidad. Pero éste es un proceso que exige práctica y que consiste en buscar en nuestro interior ese talento sin explotar, que es uno de los dones de la vida espiritual. Todas y cada una de nosotras somos entes espirituales. Este programa pavimenta nuestro camino., Cada día nos resulta más fácil vivir una vida sincera. Cada día confiamos más en las personas con las que nos relacionamos. Y cada día asumimos mayores riesgos siendo quien realmente somos. La necesidad de distorsionar lo que nos espera disminuye a medida que cosechamos los beneficios de una vida sincera, responsabl

  Cuando dejamos de tomar tan en serio nuestros errores, dejamos de temerlos. Es inmensamente importante que aprendamos a reinos de nosotras mismas. Catherine Mansfield El perfeccionismo y su control sobre nuestra vida obstruyen seriamente el camino de nuestro crecimiento y de nuestro bienestar emocional, espiritual e incluso físico. Probablemente, las lecciones de la vida surgen más de los errores que del éxito. Nuestros fallos nos enseñan a ser humildes, pues con ellos aprendemos a buscar la ayuda y la orientación de los demás. También aprendemos a no desesperarnos con los fracasos de los otros. Fallamos porque somos humanos. Cuando dejamos de temer al fracaso, nos liberamos para intentar mayores proezas. Nos atrevemos a aprender más, y con ello la vida se vuelve más completa, no sólo la nuestra, sino también la de quienes están en contacto con nosotras. Al reírnos de nuestros errores, nos resulta más fácil arraigarnos a intentarlo otra vez. La risa nos conserva jóvenes y nos a

Lo que la mayoría de nosotras desea es ser escuchadas, comunicarnos. Dora Previn Cada vez que hablamos y no somos escuchadas sentimos que nuestra calidad como personas es negada, que el “yo” que presentamos ante el mundo sufre un rechazo. “El mejor regalo que podemos darnos mutuamente es la atención total”.Si deseamos recibir atención, debemos darla. Ello significa liberarnos de todos los pensamientos extraños cuando conversamos con alguien. No podemos esperar que los demás nos den algo que somos incapaces de dar o no estamos dispuestas a dar. Ser escuchadas y escuchar a otra persona es algo más que simplemente oír. Es dejar que las palabras del otro entren en contacto con nosotras de una forma intima. Cuando compartimos nuestro ser con otra persona, no deseamos ser juzgadas, desaprobadas ni causar lastima. Deseamos saber que hemos sido escuchadas íntimamente. Y cuando tengamos la oportunidad de oír a otra persona, escuchemos atentamente las palabras que nos dirige, palabras que aum

  Cuando os necesité estuvisteis a mi lado. Vuestra fortaleza os hizo destacar por encima de las demás y me guiasteis. A cada una de vosotras os ofrezco mi ser, mi amor y todo lo que soy. Deidra Sarault Cada una de nosotras es guiada y, al mismo tiempo, somos guías de otros durante toda nuestra vida. Somos interdependientes. Donde quiera que miremos, alguien aprende de nosotras, y nosotras aprenderemos de esa persona. Generalmente no sabemos qué es lo que damos ni cuándo lo hacemos. Y pocas veces nos damos cuenta del valor de lo que recibimos en el momento en que se nos da. Quizás nuestra reacción natural sea resistirnos a lo que nos ofrece la otra persona. Pero el paso del tiempo realzará el valor de dicha experiencia. Podemos buscar a las personas que nos dan consuelo, que nos confieren fortaleza y esperanza, que nos ayudan a vencer cualquier dificultad. Necesitamos tanto los momentos difíciles como el suave apoyo de un amigo. Ambos elementos contribuyen al diseño que nuestra vid