MEDITACIONES PARA MUJERES/HOMBRES QUE HACEN DEMASIADO-19 DE AGOSTO

 


AGOTAMIENTO
Yo me sirvo de la adicción a la comida y a la cafeína para seguir adelante cuando estoy demasiado cansada para hacer el trabajo o cumplir los plazos.
ANÓNIMO
Nadie tiene sólo una adicción. Las adicciones vienen en racimos. Frecuentemente utilizamos una adicción para apoyar o enmascarar a otra. Cuando nuestro cuerpo está cansado de trabajar demasiado, utilizamos las sustancias químicas o la comida para seguir adelante.
Cuando estamos demasiado alteradas para recostarnos
y descansar, tras haber cumplido un plazo, nos servimos de la comida, del alcohol o de recetas médicas para calmarnos.
Incluso hemos utilizado actividades positivas para apoyar nuestro atareamiento y nuestra adicción al trabajo. El ejercicio es bueno para nosotras. Desgraciadamente, cuando lo hacemos de una manera frenética o cuando lo utilizamos para lograr que nuestros cuerpos estén más saludables para poder trabajar más, algo positivo se ha convertido en parte del problema. Podemos utilizar cualquier cosa para «proteger nuestra
dosis» y permitirnos permanecer en nuestra adicción.
No es lo que hago, sino la manera de hacerlo, lo que al final acaba atrapándome.

(Anne Wilson Schaef de su Libro Meditaciones para mujeres que hacen demasiado)

Comentarios

Entradas populares de este blog

ACEPTOLOGIA (Gerardo Schmedling) - Capítulo 1. El poder de la paz interior