MEDITACIONES PARA MUJERES QUE HACEN DEMASIADO-13 de ABRIL
ADRENALINA/ESTAR OCUPADAS
Les repugna la calma que sigue a la tormenta.
DOROTHY PARKER
¡Ah, ese subidón de adrenalina! ¡Cómo nos gusta!
Estamos tan acostumbradas a tratar con la crisis que nos ponemos nerviosas cuando las cosas se calman.
Muchas mujeres que nos estamos recuperando de la adicción al trabajo y que estamos haciendo demasiado, empezamos a reconocer que nos hemos hecho adictas a nuestro propio subidón de adrenalina. Solíamos obtener un «zumbido» con la excitación de un nuevo proyecto o de un plazo imperioso. Funcionábamos mejor bajo presión (o así lo creíamos). Nos poníamos nerviosas y tensas cuando nuestras vidas se volvían demasiado tranquilas. Necesitábamos el estímulo emocional.
Necesitábamos nuestra dosis.
Afortunadamente, empezamos a darnos cuenta de que nuestros aumentos de adrenalina estaban agotando nuestro cuerpo y nuestro ser. Nuestra adicción a
nuestra propia adrenalina era tan destructiva para nuestros cuerpos como las drogas o el alcohol. La recuperación de la adicción a la adrenalina ha sido un lento y doloroso proceso. Pero tenemos la esperanza de una nueva vida y la posibilidad de vivir en un cuerpo sano.
He descubierto que lo que solía llamar entumecimiento, podía ser simplemente satisfacción, y la satisfacción es estupenda.
(Anne Wilson Schaef de su Libro Meditaciones para mujeres que hacen demasiado).
Comentarios
Publicar un comentario