MEDITACIONES PARA MUJERES/HOMBRES QUE HACEN DEMASIADO-29 de MAYO
PRISAS / FRENESÍ / DESVALORIZACIÓN
Mis pautas se van, se van, se van… y se desmoronan.
ROSIE
Cuando somos adictas a trabajar, a estar ocupadas, a hacer las cosas deprisa y a cuidar de los demás, la única manera que tenemos de permitirnos descansar es desmoronándonos.
Se ha dicho que la adicción al trabajo es la adicción que eligen las personas que se valoran a sí mismas. Se nos impulsa tanto a probarnos a nosotras mismas y a hacernos un sitio que, hagamos lo que hagamos, nunca hacemos lo suficiente. Si hacemos suficiente, tal vez podamos justificar nuestra existencia. Tenemos problemas de aceptar que sólo nuestro ser puede ser suficiente.
Todas necesitamos la soledad, y las que hacemos demasiado sólo podemos justificar el permitírnosla cuando estamos al borde del colapso.
Hacer las cosas deprisa y después desmoronarme no sólo es agotador para mí, sino que agota también a todas las personas que me rodean.
Hacer las cosas deprisa y desmoronarse es una conducta cruel e inhumana. Practicarlo conmigo es cruel e inhumano.
(Anne Wilson Schaef de su Libro Meditaciones para mujeres que hacen demasiado).
Comentarios
Publicar un comentario